Si eres familia numerosa y a fecha 31 de diciembre de 2020 tenías el bono social de la luz, te puedes beneficiar también del cheque de calefacción, el llamado “bono térmico” que se creó en 2018 para ayudar a los consumidores vulnerables a hacer frente a los gastos de energía, y que ahora se ha reforzado para una mayor protección de estos usuarios.
El Gobierno ha mejorado su cuantía, ampliando la cantidad mínima a percibir, que pasa de 25 a 35 euros, así como la dotación presupuestaria, que se incrementa en unos 100 millones de euros. Aunque la cuantía a percibir por cada hogar beneficiario varía en función de la zona climática en la que se resida, según los cálculos del Gobierno, la media será de unos 90 euros por hogar. En cuanto a la fecha en la que llegará a las familias, la previsión es que se reciba en el mes de diciembre y será, como siempre, de manera automática, sin que haya que solicitarlo. Los beneficiarios recibirán una notificación al respecto por parte de la Consejería correspondiente de su comunidad autónoma, ya que son las comunidades las que se ocupan de la gestión.
Este bono social térmico se configura como un programa de concesión directa de ayudas destinadas a paliar la pobreza energética en consumidores vulnerables, en lo que respecta a energía destinada a usos térmicos, tales como calefacción, agua caliente sanitaria o cocina. Se financia por parte del Ministerio de Transición Ecológica, este año con una dotación de 202,5 millones de euros (hasta ahora eran 102,5 millones). Más información en el Real Decreto-ley 23/2021, de 26 de octubre, de medidas urgentes en materia de energía para la protección de los consumidores y la introducción de transparencia en los mercados mayorista y minorista de electricidad y gas natural. Ver publicación en el BOE aquí.
